Karmatrón
 Primera ilustración de Zacek (1985). Arte de Oscar González Loyo.
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Características como Guerrero Kundalini
- Nombre de Batalla: "Karmatrón". El nombre viene de la unión de las palabras Karma, que es la ley de la causa y el efecto; y el sufijo Tron, relacionado con la Física y que remite a la parte cibernética del personaje.
- Objeto de Poder: Kalpé-Om. Es un cinturón que le fue obsequiado por el Gran Espíritu. Le permite a Zacek transformarse en Karmatrón al pronunciar un mantram conocido como La Oración del Kalpé Om: La' Yume' Num T'ox Muk' Il In Tial (Sí Padre, concédeme lo que se ha dicho. Repartir, dando a todos mi energía... sin esperar recompensa a cambio).
- Lugar de Poder: La Montaña Merú en el Planeta de la Eternidad y las zonas subteráneas impregnadas de energía Vril presentes en cualquier planeta vivo.
- Punto Débil: La boca del estómago donde se encuentra su abertura astral. Si recibe energía negra en ese lugar, se debilita muy rápidamente. También le afecta el negativismo del ambiente como los que existen en Metnal y la Zona de la Obscuridad.
- Poderes Kundalini: Puede manejar la energía pránica a su antojo en forma de descargas de energía, o puede crear armas como shurikens o boomerangs y usarlos como uno de verdad. Dependiendo de su armadura, ha demostrado tener diferentes poderes.
- Otras Armas: Sable del Poder. Este sable puede cortar cualquier material por duro que sea y es susceptible al negativismo del ambiente lo cual puede debilitarlo.
Primera Armadura (Nueva Era)
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Primera Armadura (Era Clásica)
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Segunda Armadura (Era Clásica)
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Tercera Armadura (Era Clásica)
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Armadura de las Novelas Gráficas
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Historia
Zacek nació en Atlán, capital del Planeta Zuyua. Sus padres fueron el Emperador Canilek, líder de la Raza Zuyua y de la Emperatriz Sictia, esposa de Canilek. Tuvo un hermano de nombre Nazul. Al ser hijo de emperadores, Zacek ostentó durante casi toda su vida el título de príncipe de los zuyua por mucho tiempo hasta que adoptó el cargo de Emperador que le correspondía por derecho.
Antes de convertirse en un Guerrero Kundalini, durante toda su niñez Zacek corrió muchas aventuras y conoció a muchos amigos. Uno de ellos sería su entrañable y querida mascota: Jiva.
Cierto día Zacek y Zip, el hijo del Embajador Zap decidieron ir a jugar al Bosque de Árboles Gigantes, un lugar lleno de vida y hogar de la especie de los shumuks. Mientras se adentraban en el bosque llamaron la atención de un pequeño cachorro shumuk. Al percatarse de que eran observados, Zacek y Zip se acercaron al animalito. Zacek trató de acariciarlo, sin embargo el pequeño cachorro aún no aprendía buenos modales y le dio un buen mordisco en un dedo al príncipe zuyua.
Dada la agresividad del animalito optaron por dejarlo y seguir aventurándose en el bosque. Por lo tanto decidieron visitar unas cuevas cercanas. En cuanto el cachorro escuchó el plan de los chicos, se alarmó pensando en "el dragón", una feroz criatura de tres cabezas que habitaba en la cueva y que era el depredador natural de los de su especie. Por lo que decidió seguir a los chicos.
Zacek y Zip entraron en la cueva donde eventualmente se vieron en problemas al ser amenazados por la criatura que el pequeño cachorro temía. Sin embargo, armándose de valor y a costa de su propia vida, el animalito ayudó a escapar a los chicos al llamar la atención del dragón distrayéndolo mientras los chicos trataban de huir. Pero no lograban alcanzar la cima del risco en el cual se encontraban por lo que el pequeño shumuk se convirtió en soga para que pudieran trepar y después de poner fuera de combate al dragón lograron salir sanos y salvos de la cueva.
Para demostrar su agradecimiento, Zacek le ofreció al cachorro adoptarlo como mascota y decidió nombrarlo Jiva, que en lenguaje zuyua significa "entidad atómica viviente", dada la característica más emblemática de los de su especie la cual es cambiar su anatomía para transformarla en otra cosa a voluntad.
A Jiva pareció no gustarle mucho el nombre propuesto por Zacek pero con tal de gorrear comida gratis entre otros lujos pensó que en realidad era un pequeño sacrificio comparado con la nueva vida que le aguardaba. Desde entonces Zacek y Jiva empezaron una amistad que duraría toda su vida.
Zacek poseía un intelecto privilegiado, por lo que el profesor Dhatú aprovechó para enseñarle una nueva y compleja tecnología que este último y su esposa habían estado desarrollando. El objetivo era lograr crear robots que fueran capaces de experimentar sentimientos. Zacek aprendió la tecnología y sabiendo de los problemas políticos de su padre con el malvado líder de los metnalitas, Asura, y dado que siempre estaba latente la amenaza de un ataque a su planeta, se dispuso a aplicar sus avanzados conocimientos en cibernética en crear algo que pudiera defenderlos en un momento dado, ya que su raza se dedicaba más bien a asuntos místicos y no militares por lo que no contaban con una fuerza bélica que se comparara con las de Asura.
Fue entonces que Zacek dio inicio a la construcción de 4 robots que eventualmente se convertirían en los primeros transformables, ya que además de darles la habilidad de experimentar sentimientos les dio también la capacidad de transformar su apariencia de robot en un vehículo. Zacek se encontraba terminando sus 4 robots en la época en que por fin el inminente ataque a su planeta de estaba llevando a cabo cuando Nazul entró en el laboratorio y empezó a indagar en lo que él estaba haciendo. Aún después de explicarle su plan Nazul no comprendía la importancia y complejidad del proyecto de su hermano menor y comparó sus conocimientos al demostrar que la construcción de Robby era un ejemplo de los juguetes que él también hacía de niño.
Momentos después ambos príncipes fueron convocados a una reunión de urgencia junto con los altos líderes de la raza zuyua donde se discutirían varios asuntos importantes como el plan de escape a bordo de Astronave Atlantis y el anunciamiento de una antigua profecía zuyua que involucraba a los descendientes de Canilek, es decir, a Zacek y a Nazul. Toda la raza zuyua escaparía en Atlantis con destino al Planeta Azul pero los jóvenes príncipes serían enviados a una misión especial al Planeta de la Eternidad.
Ni a Zacek ni a Nazul les agradó la idea de abandonar a su padre en un momento como ese, pero después de razonar con él aceptaron ir a cumplir su misión. Abandonaron el Planeta Zuyua sin saber a dónde dirigirse con certeza, pero Zacek sugirió que estuvieran en silencio para conocer el camino. Así lo hicieron y el místico planeta que buscaban se materializó. Aterrizaron y sus instintos los condujeron a una montaña, la cual se llamaba Merú. Cuando se aproximaron vieron un santuario, pero la puerta estaba cerrada. Nazul estaba inquieto porque de alguna forma percibía peligro, pero Zacek, más confiado que su hermano, se acercó a la puerta del santuario y ésta empezó a abrirse. Cuando Zacek entraba y Nazul se disponía a seguirlo, un guardia metnalita que los venía siguiendo desde que los príncipes dejaron Zuyua atrapó a Nazul. Zacek, alarmado, trató de ir en ayuda de su hermano pero la puerta del santuario se lo impidió al cerrarse de golpe. A pesar de los gritos de Zacek, la puerto no se abrió y una voz lo tranquilizó, invitándole a cumplir su misión para poder ayudar a su hermano.
En la Nueva Era, Zacek fue puesto a prueba antes de llegar al lugar donde reposaba la Serpiente Kundalini. Tenía que elegir una de 7 cuevas para continuar su camino. Después de meditarlo un poco y recordar la eseñanza kundalini de que todo tiene un principio, decidió entrar por la primera cueva y de repente las 7 cuevas desaparecieron y sólo quedó una. Zacek entró por la única cueva que quedaba y se encontró con el místico ofidio, que descansaba enroscado ante una columna que contenía los 7 chakras de energía.
Nervioso, Zacek recordó las palabras de su padre y empezó su meditación. La serpiente empezó su lenta ascensión activando los chakras, uno por uno, y el pequeño príncipe empezó a sentir el poder fluyendo por su cuerpo. Esa sensación hizo que por un momento olvidara el verdadero propósito que lo había llevado a ese lugar y empezó a tener ideas negativas acerca de dominar el universo y volverse un dictador como Asura. Esto detuvo a la serpiente en su ascenso, pero Zacek recapacitó y desechó los pensamientos negativos justo a tiempo. La serpiente completó su ascención hasta que activó el séptimo chakra. En ese momento una luz brillante envolvió a Zacek y la serpiente se transformó en un ser humano.
Este ser humano felicitó al príncipe por lograr la hazaña de tratar de despertar a la serpiente sin morir en el proceso y se presentó ante Zacek como Katnatek, el guía espiritual de todos aquellos que logran lo que el pequeño príncipe acababa de hacer. En la era clásica Katnatek le otorgó a Zacek un cinturón de poder. En la nueva era hizo que Zacek pasara por una puerta especial parecida a un arco y el cinturón apareció en la cintura del príncipe. Entonces Katnatek le enseñó a Zacek un mantram especial conocido como la oración del Kalpé-Om, el cinturón que el pequeño acababa de recibir. En cuanto Zacek pronunció la oración, su cuerpo sufrió una metamorfosis increíble. Se transformó en un ser gigantesco con la apariencia de un enorme robot. En realidad era una ultrapoderosa armadura energética computarizada que se había materializado y el cuerpo del joven príncipe y la armadura se hicieron uno. En este estado, Zacek recibía como nombre de batalla el de Karmatrón.
En la era clásica, Zacek volvía a su estado natural poco después de su primera metamorfosis. En la nueva era se mantuvo con su armadura y Katnatek empezó un diálogo con Zacek donde le explicaba por qué había sido elegido para tener este poder. Los diálogos en ambas partes de la cronología varían un poco, en el de la nueva era Zacek recuerda con dolor a su madre cuando Zacek siente que su padre ha sido asesinado. Entonces Zacek recuerda a su hermano y decide salir en su ayuda. Su maestro le da los últimos consejos antes de que vaya a Metnal, el único lugar donde su poder podía ser nulificado y en consecuencia perder la vida. Entonces como Karmatrón emprendió el vuelo hacia el planeta de Asura.
Al acercarse al planeta, Zacek se sintió débil, confirmando las palabras de su nuevo guía espiritual y se dio prisa en ayudar a Nazul. Zacek aterrizó en la Zona de la Obscuridad y volvió a su apariencia normal. A ese lugar los secuaces de Asura habían llevado el cuerpo inconsciente y torturado de Nazul por órdenes del malvado emperador. Sin embargo, Zacek había llegado demasiado tarde. Las bestias del horrible lugar ya habían empezado a devorar el inerte cuerpo sin vida de Nazul. Con dolor y muy débil por el negativismo del lugar, Zacek nuevamente se convirtió en Karmatrón. Tomó los restos del cuerpo de su hermano y emprendió el vuelo hacia el Planeta Zuyua. En la era clásica, Asura veía alarmado cómo Karmatrón se alejaba de Metnal. En la nueva era, Asura observó todo desde que Karmatrón había llegado a Metnal y cómo se había convertido en el pequeño Zacek. De esta forma, se da una de las diferencias más importantes entre estas dos eras del cómic. En la nueva era Asura ya sabe desde el principio que Zacek es Karmatrón. En la era clásica lo descubre unos cuantos números después.
Al llegar Zacek al devastado, abandonado y desolado Planeta Zuyua, buscó el cuerpo de su padre. Después de encontrarlo, con dolor se dedicó a cremar los cuerpos de su padre y hermano en una pira. En la era clásica Katnatek aparece ante Zacek entre las llamas para confortar al muchacho y enseñarle a ver la muerte con los ojos de un Guerrero Kundalini. En la nueva era, sin embargo, los espíritus de su padre, madre y hermano aparecen para consolarlo y de cierta forma le dan el mensaje que Katnatek le da en la era clásica.
En el No. 4 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), Zacek se reencuentra con Jiva quien le revela quién es el asesino de su padre y eventualmente ambos encuentran a una chiquilla desconocida atrapada entre las ruinas de un edificio. Después de salvar a Lis-Ek, son atacados por un robot Z-1 y aprovechando las habilidades de Jiva, le pide que se convierta en un escudo reflector, destruyéndolo con sus propios rayos, mientras son observados por Asura. Más tarde los tres suben a una nave y salen en busca del resto de los zuyua que escaparon a bordo de la Astronave Atlantis.
En el No. 5 (Era Clásica), Zacek, Lis y Jiva llegan a Gnomulón pero son recibidos por naves gnomulonas enemigas. Sin embargo, gracias a sus habilidades como piloto, Zacek esquiva a las naves y aterriza exitosamente en Gnomulón. Pero son capturados por los inorgánicos y terminan bajo la amenaza de Bórax de ser petrificados.
Por fortuna, en el No. 6 (Era Clásica), una tropa de valientes gnomulones orgánicos liderados por el príncipe Cord, se presenta ante Zacek y juntos hicieron huir a los inorgánicos.
Juntos fraguan un plan y Zacek reactiva a los Guerreros Estelares que yacen desactivados dentro de Atlantis y también rescatan a Robby que había quedado encerrado accidentalmente dentro de Atlantis.
Al regresar al campamento improvisado de los gnomulones orgánicos, Zacek, Lis, Cord, Gorok y Jiva deciden empezar el rescate de sus amigos y se aproximan a los túneles que los conducirán a las minas donde el resto de los gnomulones orgánicos y los zuyua están prisioneros, sin saber que se dirigen a una trampa.
En el No. 7 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), nos enteramos que Zacek y el grupo de rescate son capturados y Aspier, Bórax y Magma obligan al Principe Zuyua a observar a sus amigos mientras estos batallaban con enormes bestias.
En un descuido, mientras los villanos observaban la escena, Zacek llama a los Guerreros Estelares por un pequeño transmisor que escondía y dieron cuenta de las colosales bestias, mientras el grupo de rebeldes lograban escapar.
Entonces los gnomulónes inorgánicos dispararon sus rayos petrificadores hacia los Transformables y los convierten en enormes estatuas de piedra. Zacek al presenciar esto, pronuncia su mantram mágico, invocando su armadura energética y convirtiéndose en Karmatrón. Los traidores al verlo se dieron a la fuga hacia el centro del planeta donde ellos habitan.
Luego de ese suceso, Zacek y Robby logran encontrar una de las armas petrificadoras de los gnomulones inorgánicos e invierten la polaridad de ésta para así poder volver a la normalidad a los Guerreros Estelares.
Sin saberlo, Aspier reportaba los hechos al emperador de mal Asura. Éstos empezaron a formular el plan para destruir a la Astronave Atlantis y con un as bajo la manga, Garkoz preparaba el arma definitiva para poder destruir a Karmatrón.
En el No. 8 (Era Clásica) Magma le ordena a sus ejércitos que destruyan a la Astronave Atlantis, pero Zacek, Titán y Unicornio se encargaron de destruirlos para proteger su nave y recuperarla. Después de esto, Katnatek se aparece ante Zacek para advertirle que Asura lo atacaría con una gran maquina destructora y le pide que se prepare, ya que el Emperador Metnalita es el mal personificado.
Ante esta advertencia, el príncipe zuyua decide esconder la Astronave Atlantis en una de las lunas de Gnomulón para protegerla y le pide a Robby que una vez que salgan, active el blindaje y esté al pendiente de los teletransportadores.
Después de poner la nave a salvo, Zacek y los Transformables se reúnen con sus amigos en el Planeta Gnomulón y el príncipe le pide a Bantar que todos los zuyua se teletransporten a ella. Luego se reúne con el Rey Gen y éste le pide que recupere la Gema Sagrada y la devuelvan al templo del Dios Pranam, para poder ser completamente libres.
Se organiza un grupo conformado por Zacek, Lis-Ek, Cord, Gorok, Jiva, Titán, Estelaris, Acuarius y Unicornio para entrar por sorpresa al cuartel general de los gnomulones inorgánicos y logran hacer huir a los traidores y recuperar la Gema Sagrada.
Entonces, Asura aparece piloteando a Escorpión y causando pánico entre los gnomulones orgánicos.
El No. 9 (Era Clásica) inicia con Zacek y compañía a punto de ser capturados por Escorpión, cuando los Guerreros Estelares entran en acción para frenar el ataque del colosal gladiador cibernético.
A pesar de ser cuatro, Titán, Acuarius, Estelaris y Unicornio solo consiguen frenarlo momentáneamente y Escorpión pronto los despacha para ir en búsqueda del príncipe Zuyua.
Una vez localizado, a Zacek no le queda otra opción que transformarse en Karmatrón exponiendo su secreto por primera vez. Asura lanza el primer ataque contra Karmatrón. Ambos enemigos se enfrentan por vez primera y la experiencia guerrera de los Metnalitas se impone. Karmatrón se queda sin energía, tiene que abandonar la armadura y ocultarse en un bosque cercano.
Asura se desespera por no poder encontrarlo y empieza a disparar las armas de Escorpión, pero gracias a que Jiva se convirtió en un escudo reforzado de titanio en forma de roca, Zacek no sufre ni un rasguño.
Zacek se oculta en una cueva y se desplaza espiritualmente al Santuario de Merú para poder recargarse de energía. Después de eso, en su camino para rescatar a Lis-Ek, encuentra los Guerreros Estelares inertes y se comunica con Bantar para que el profesor Dhatú pueda repararlos.
Mientras Asura presenta sus condiciones al Rey Gen que no tiene más remedio que aceptarlas, puesto que la alternativa es la aniquilación de su pueblo, Zacek intenta el rescate de Lis aprovechando la habilidad de Jiva de metamorfosearse en pájaro y la suya propia de volverse invisible. Su plan fracasa y es capturado por el Emperador del Mal.
En el No. 10 (Era Clásica), Asura sorprende a Zacek describiéndole el proceso de la obtención de la armadura y los detalles de la montaña Meru, incluyendo a Katnatek. También lo trata de convencer para que se una a él y juntos dominar el universo. Ante su negativa, Asura da muestras de su poder al informarle la localización de la Astronave Atlantis y lo amenaza con la aniquilación de la diezmada raza Zuyua así como los gnomulones orgánicos. Los prisioneros son dejados en la celda para que Zacek piense cual será la respuesta, la conquista o la aniquilación.
Zacek ordena un ataque coordinado de los Cazas Zuyua y los Guerreros Estelares contra Escorpión y ahí nuevamente Titán, Acuarius, Estelaris y Unicornio se enfrentan al Gladiador Cibernético para evitar que llegue al Palacio Gnomulón sin éxito. Al ver esto, se transforma nuevamente en Karmatrón y repele el ataque, dañando severamente a Escorpión. Asura ordena la retirada dejando atrás a Magma, Bórax y Aspier, que frustrados ven alejarse al coloso.
La multitud vitorea a Karmatrón y las despedidas comienzan. Los Gnomulones le sugieren a Zacek y compañía visitar el planeta Naacal en su paso rumbo a Yug (base de la G.A.U.), puesto que el Planeta Azul aún es muy inestable.
Los Zuyua son teletransportados a la imponente astronave y parten es busca de un nuevo hogar.
En el No. 11 (Era Clásica), Zacek se entera por Katnatek que Asura también despertó a la Serpiente Kundalini sin embargo, los pensamientos negativos se apoderaron de su mente una vez adquirido el poder, pero Katnatek no hizo nada ya que el Gran Espíritu no le permite intervenir directamente en la vida de los iniciados, solo les muestra el camino, si el iniciado escoge el sendero del bien, entonces se vuelve su guía espiritual.
Mientras tanto en la cabina de mando de la Astronave Atlantis, la tripulación avista una nave desconocida a la deriva. Trataron de comunicarse pero nadie respondió y descubrieron que no había signos de vida, no tenía insignias y no se sabía si pertenecía a la G.A.U. Con sus poderes psíquicos Zacek detectó peligro y para salir de dudas decidió él ir a investigar. Lis y Jiva se apuntaron para acompañarlo.
Al entrar a la extraña nave, uno de los androides pirata golpeó en la cabeza a Zacek y junto con con Lis-Ek fueron capturados. Solo Jiva no fue atrapado porque tenía la facultad de ocultar su presencia. De inmediato fueron colocados en el Duplicador de Transformación en Electrones para transferirlos a las unidades cibernéticas RX-T y WWV. Así Zacek y Lis fueron sometidos a un extraño tratamiento para duplicarlos y hacer androides parecidos a ellos.
En el No. 12 (Era Clásica), una vez que Zacek y Lis-Ek fueron liberados por Jiva, salieron en busca del pirata espacial, pero se encontraron con varios obstáculos a su paso, entre compuertas selladas y robots autómatas, hicieron difícil el proceso, pero finalmente llegaron a donde se encontraban prisioneros los Guerreros Estelares y el profesor Dhatú.
Zacek dio la orden y los Transformables entraron en acción, quienes rápidamente dieron cuenta de los robots piratas. Luego de ello, encontró y enfrentó a Kazak, quien le disparó, pero el Príncipe frustró el intento creando un aura protectora. El androide RX-T (doble de Zacek) al darse cuenta de esto, saltó encima de él y pelearon.
Kazak estaba a punto de disparar, pero Lis hizo su aparición y lo desarmó. Rápidamente la androide WWV (doble de Lis) le disparó y la dejó muy mal herida. En ese momento, Elnar destruyó a la androide y Zacek por su parte lanzó un par de boomerangs pránicos y destruyó a su doble.
Los androides piratas fueron vencidos, Bantar capturó a Kazak pero Lis-Ek estaba muy mal y se debatía entre la vida y la muerte.
En el No. 13 (Era Clásica), el reporte medico no es alentador, solo un milagro salvaría a la pequeña Lis-Ek. Zacek invoca a su guía y maestro Katnatek quien le indica que existe alguien en el planeta Gualna que tal vez podría hacer algo: Shilbalam.
De inmediato, Zacek, Lis y Jiva a bordo de Estelaris se dirigieron al planeta Gualna, en compañía del resto de los transformables. Por fin arriban al planeta y lo único que localizan es una pequeña y primitiva aldea. No se ve nada que la tecnología zuyua no tenga a su disposición para salvar a la pequeña.
Zacek trata de hacer contacto, pero los habitantes de la aldea están atemorizados porque el brujo Akab los domina. Cuando les explica que vienen buscando a Shilbalam, los aldeanos lo describen como un viejo loco y le dicen que optó por irse a las montañas. Zacek parte de inmediato en busca del viejo y después de pasar una zona pantanosa por fin escucharon a alguien cantando. Zacek se acerca sin hacer ruido, sin embargo es saludado por el brujo blanco que lo llama por su nombre y le dice por qué llegó a Gualna. Mientras tanto, Akab logra percibir a los intrusos.
Shilbalam demuestra que es un ser evolucionado y que puede manejar las fuerzas de la naturaleza a su antojo, logrando sanar a Lis-Ek.
Las fuerzas de Akab son detectadas por Zacek y Shilbalam le explica que vienen a capturarlos. El Príncipe de inmediato envía a los Guerreros Estelares a combatirlos.
En el No. 14 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de la destrucción de Acuarius, Titán, Estelaris y Unicornio, junto con Zacek, hacen que las tropas de Akab emprendan la retirada, hecho que provoca gritos de júbilo en Lis y Jiva que a la postre despiertan a Shilbalam.
Una vez despierto, los visitantes ponen al tanto al brujo blanco (que minimiza la batalla recién terminada), y da muestras de saber más de lo que aparenta, al conocer a Karmatrón y el papel que desempeñará en el futuro. Shilbalam les dice que la batalla anterior solo fue un ensayo y deben de prepararse para enfrentar a Akab en persona. Cuando es cuestionado sobre el porqué no a enfrentado a Akab, Shilbalam explica que a él no lo mueve el poder, no necesita saberse poderoso, en comparación de su contraparte. Se defenderá si es necesario, más lo hará con una mente tranquila y en paz. En ese momento Zacek entiende por qué lo envió Katnatek con el brujo blanco.
En ese momento, Akab se materializó entre los Zuyua. Zacek trata de explicar el porqué de su estancia en el planeta y como Shilbalam curó a Lis, sin embargo, Akab se ríe, puesto que considera al Brujo solo como un viejo loco. Akab lanza insultos a Shilbalam que son devueltos con ironías, lo cual enfurece a Akab y comienza el duelo de brujos. Para cada ataque de Akab, Shilbalam tiene un contra hechizo, enfureciendo aún más a su contrincante. La tensión hace presa de Zacek que no encuentra como ayudar a su nuevo amigo. Shilbalam aparenta ser derrotado por Akab. Al tiempo que cae estrepitosamente, Zacek pronuncia el mantram que lo transforma en Karmatrón para enfrentarse a Akab.
Fue en el No. 15 (Era Clásica) cuando Akab se transformó en un gigantesco dragón, disparándole una gran ráfaga de fuego puso en aprietos a Karmatrón.
Karmatrón intento congelar al hechicero y destruirlo pero no seria tan fácil. El hechicero obscuro le lanzó varios ataques que el príncipe logro evitar. Viendo que no daban resultados sus ataques, invocó a bestias gigantescas que aprisionaron y lastimaron a Karmatrón, así que los Guerreros Estelares al presenciarlo salieron prestos al ataque.
Karmatrón y los Transformables dieron cuenta rápidamente de las feroces bestias, y el hechicero trato de huir. Karmatrón y los Trasformables lo siguieron hasta un volcán, donde Karmatrón le disparó y lo hizo caer. Al reponerse el mago obscuro, volvieron a iniciar el combate, los dos dispararon poderosas descargas de energía, pero la balanza se inclinó hacia Karmatrón, tirando al mago hasta el fondo del volcán perdiéndose entre el magma ardiente. Ese fue el final de Akab y al morir, sus infernales criaturas desaparecieron.
Mas tarde los aldeanos agradecieron a Zacek y sus amigos por su ayuda contra el mago obscuro, pidiéndole al hechicero Shilbalam que fuera su guía, pero éste, les dio las gracias y se negó, pues el príncipe Zacek lo había invitado a formar parte de su viaje (supuestamente) y regresaron todos juntos a la Astronave Atlantis.
En el No. 16 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de haber salvado a los pobladores de Gualna del malvado hechicero Akab, Titán, Estelaris y Unicornio, junto con Zacek, Lis, Jiva y Shilbalam, se dirigen al planeta Yug para reunirse con sus amigos pero son atraídos por el Hoyo Negro, llevándolos a un lugar donde reinaba el vacío y la desolación. La vida no existía en este lugar y debido al vértigo del viaje y a la situación, nuestros héroes quedaron inconscientes y los robots desactivados.
Zacek reactivó a los Guerreros Estelares y pidió a Titán que escudriñara el lugar, pero los sensores de actividad no respondían ya que algo se los impedía. En eso, un rayo directo los golpeó y cambió la programación de los Transformables. Una voz se escuchó y les dijo: '¡¡Deténganse o al primer movimiento, serán ejecutados¡¡'.
Zacek ordenó a Titán atacar, pero éste no respondió a su llamado. La voz les ordenó que atraparan a los humanos, a lo que esta vez si obedecieron, Zacek y compañía huyeron para no ser capturados. Entonces, la extraña voz pidió a los Transformables que los dejaran de perseguir, ya que al final caerían en una de sus trampas del lugar.
Poco después, las trampas empezaron a hacer su aparición y unos tentáculos mecánicos salieron de las paredes y aprisionaron a nuestros héroes, pero Shilbalam y Zacek lograron zafarse y ayudaron a los demás. Cañones láser les disparaban desde las paredes y techos del lugar, obligándolos a entrar a un cuarto obscuro. Ahí Shilbalam derritió las paredes para liberar al grupo y siguieron la travesía llegando a otro cuarto, donde vieron una gran máquina: El Cerebro Cibernético, que les hablaba y les decía que sus cuerpos iban a ser estudiados, pues necesitaba respuestas, que nunca pudo obtener.
En el No. 17 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de ser capturados, Shilbalam pasa a la acción y usando su báculo de acumulador absorbe la energía del campo de fuerza que los retiene para redirigirla a otro lugar, liberándolos momentáneamente. El Cerebro Cibernético al darse cuenta de la fuga envía a un ejercito de robots a recapturar a nuestros amigos, recalcando que no quiere que los dañen. Zacek mantiene a raya a los robots con sus boomerangs energéticos y luego une fuerzas con el Brujo Blanco para atacar al Cerebro Cibernético, sin embargo el ataque es infructuoso.
Los Guerreros Estelares (que se encontraban en control del Cerebro Cibernético) son enviados para capturar a nuestros amigos. Incapaces de atacar a los Guerreros Estelares por miedo a dañarlos, el grupo se rinde. Entonces Shilbalam comprende que es lo que busca el Cerebro Cibernético y pregunta ¿que es amor?. Al no estar dentro de la capacidad de una máquina comprender algo intangible entra en corto circuito, liberando de su control a los Transformables. Rápidamente Estelaris se transforma para que nuestros héroes puedan abordarlo y el grupo sale de ahí a toda velocidad mientras todo se destruye a su alrededor. En la huida el grupo es atrapado en un vórtice que los regresa al espacio conocido.
En el viaje rumbo a la base de la G.A.U. en el planeta Yug, Shilbalam les explica a Zacek, a Lis-Ek y a Jiva que fue lo que pasó y por qué el Cerebro Cibernético sucumbió ante su sencilla pregunta. Al llegar son recibidos por Bantar y Elnar. Zacek les presenta a Shilbalam y estos agradecen haber salvado a Lis-Ek.
En el No. 18 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de que Zacek y sus amigos llegaran a Yug, se reunieron con el primer ministro Tdashi ya que estaban buscando un planeta donde vivir. Éste les sugirió el planeta Naacal ya que era habitable e incluso ya existían pequeñas colonias en él. Durante su estancia en Yug, Zacek junto con el Profesor Dhatú le dieron su nueva estructura a Acuarius y construyeron a Magneto, Warp y Explorador.
Posterior a esto, la astronave Atlantis se dirige a Naacal viajando por el hiperespacio; pero al llegar son recibidos con una fuerte explosión en la superficie del planeta. Una colonia pide auxilio pues son atacados por piratas espaciales llamados Kralloks. Zacek da la orden a los Guerreros Estelares y salen a auxiliar a los colonos. Al aterrizar, los colonos piden a Zacek que evite a toda costa que los Kralloks dañen el Succionador de energía nuclear, pues de lo contrario el planeta entero volaría en mil pedazos.
Los Guerreros Estelares toman la iniciativa y comienzan a destruir a las fuerzas Krallok, que al verse vencidos disparan directo al succionador. El succionador vibra con fuerza y los colonos comienzan la retirada al saber que el planeta va a explotar de un momento a otro.
En el No. 19 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), Zacek no pierde tiempo, se transforma en Karmatrón y se dirige directamente al succionador dañado. Katnatek aparece y le da instrucciones de como reparar el daño, haciendo hincapié de que solo dispone de 20 minutos para realizar las reparaciones pues una exposición más prolongada a la radiación y la presión terminarían por derretir la armadura. Sin perder tiempo, Karmatrón se pone manos a la obra taladrando un túnel paralelo al succionador.
Finalmente logra llegar a la parte que aún no a sufrido daños y rápidamente comienza la reparación. Entonces una explosión lanza a Karmatrón por los aires, la estructura está muy dañada y hay que ser cuidadoso al repararla. La explosión merma su energía, sin embargo, nuestro héroe no claudica y reanuda las reparaciones. La energía esta a punto de agotársele cuando llega a la superficie.
El coloso cae estrepitosamente completamente agotado. Ya en estado inconsciente, Zacek recupera su forma humana y deja ver que todo su cuerpo esta lleno de llagas producto de la radiación. Es trasladado a un hospital para su atención aunque las cosas no se ven muy bien para el joven príncipe.
En el Karmatrón y Los Transformables No. 20 (Era Clásica), Zacek se encuentra en estado crítico ya que sufrió graves quemaduras al reparar el succionador de energía nuclear. Shilbalam pide estar a solas con él y entonces Katnatek se materializa. Entre los dos intentarán regresar a Zacek. Shilbalam curando la parte física y Katnatek guiándolo en la parte espiritual. Shilbalam no pierde tiempo y aplica energía pránica y mientras esto pasa, la parte espiritual de Zacek caía en un vórtice donde el espacio y el tiempo no existen. Pronto se da cuenta que esta en los dominios de la muerte. Zacek se resiste a la idea de su mortalidad, y después de mucho luchar, se da cuenta que esta batalla no la puede ganar. Se tranquiliza y acepta su destino, sin aferrarse al mundo físico. La muerte entonces se transforma en Katnatek quien le explica que su prueba ha terminado, ha conquistado el temor a la muerte.
Terminada la lección, Zacek despierta en su regenerado cuerpo y es bienvenido por Shilbalam.
En el No. 21 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), Shilbalam y Zacek (que se encontraban en la enfermería) captaron el peligro en el se encontraban los Transformables ya que estaban enfrentando al monstruo robot Volt X-5, y rápidamente el príncipe zuyua se dirigió al Planeta de la Eternidad para cargarse de energía.
Zacek (ya convertido en Karmatrón) se unió a la batalla y se enfrentó al robot enemigo, el cual utilizó sustancias ácidas y golpes de sus tenazas, finalmente, Karmatrón utilizó un par de shurikens pránicos y con ello logró destruir a Volt X-5 mientras los colonos lo vitoreaban.
En el No. 22 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de recibir una llamada de auxilio por parte del Ministro Tdashi, Zacek, Titán, Estelaris y Unicornio viajan a al planeta Gnomulón para combatir al Monstruo de la Profundidades, una criatura nativa del mundo subterráneo del planeta que salió a la superficie para atacar a los gnomulones.
Al llegar, el monstruo derribó a Zacek y a Estelaris (que iba transformado en modo nave) con un rayo que salió de boca y estuvo a punto de aplastarlos, pero Titán utilizó su cañón para salvar a sus amigos y logró desviar a la bestia. Poco después, se coordinó un ataque conjunto con las Naves Gnomulonas y los Guerreros Estelares para evitar que la creatura llegara a la ciudad. Al ver los intentos fallidos, Zacek se convierte en Karmatrón para combatir al Monstruo de las Profundidades y logra noquearlo para después, llevarlo a una de las lunas de Gnomulón, abandonándolo ahí.
En el No. 23 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), después de que el Profesor Dhatú y Shilbalam presentaran su nuevo invento: La Nave Tao, Zacek fue parte de la expedición al Planeta Azul para poder conseguir metales como Hierro, Níquel y Titanio que no eran abundantes en Naacal y mientras tanto, Jobati junto con Faun observarían el progreso de las mutaciones en plantas y animales. Dicha expedición también la conformaban Lis-Ek, el profesor Dhatú, Titán, Acuarius, Estelaris, Unicornio, Magneto, Warp, Explorador y era encabezada por Bantar.
En el No. 24 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), a su regreso a Naacal, Zacek le pide a Lis que busque a las mascotas y se dan cuenta de su desaparición. Regresan rápidamente al Planeta Azul y se dividen en equipos para buscarlos: Zacek, Jobati y Warp se dirigieron hacia el norte; Unicornio y Estelaris hacia el sur; Bantar, Lis y Magneto hacia el este y Titán y Acuarius hacia el oeste. Mientras tanto, el Profesor Dhatú, Faun y Explorador aguardaron en la Nave Tao.
En el No. 26 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), continua el enfrentamiento ente Karmatrón y Toakidage. Nuestro héroe se encuentra completamente petrificado y a merced del Dragón Volcánico, pero Katnatek intervino y se comunicó con Zacek para que se concentrara y dejara que la energía acumulada en su abdomen fluyera. Con esto, Karmatrón logra liberarse y rápidamente atacó al Dragón Volcánico utilizando unos rayos congelantes. Después, nuestro héroe crea un poderoso sable de hielo para contrarrestar los proyectiles de lava lanzados por Toakidage y así derrotar a la creatura.
En el No. 27 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), al regreso a Naacal después de la aventura con Toakidage, Laya, el monstruo absorbente atacó con rayos de energía a la Nave Tao y Zacek les ordena a los Guerreros Estelares que salgan a combatir a la creatura. Esta creatura tenía la facultad de absorber la energía de los demás para alimentarse. Otra característica de Laya era que con un simple toque a sus adversarios podía duplicar las partes más importantes de éstos. También les pide a los demás tripulantes que se vayan a la Base de Control y lo dejen junto a Explorador por si los Transformables los necesitan. El príncipe zuyua le ordena al pequeño transformable que revise el cráter para ver si puede encontrar algo.
Los Transformables lo atacaron con sus láser, pero lo único que lograban era que el Monstruo Absorbente aumentara su tamaño. Poco después, absorbió la energía de Titán, de Estelaris, de Acuarius, de Unicornio, de Magneto y de Warp, convirtiéndose así en: Laya, El Multitransformable.
Cuando el monstruo detecta a Zacek y trata de pisarlo mientras los demás lo ven en los monitores, Zacek se convierte en Karmatrón y lo enfrenta. El monstruo vapulea a Karmatrón usando las armas más representativas de los Guerreros Estelares a los que les absorbió la energía.
De pronto, el Kalpé OM empieza a brillar, el Coloso de Acero estaba perdiendo energía rápidamente porque no se había recargado después de su combate con Toakidage, quedando a merced del Multitransformable.
En el No. 28 de Karmatrón y Los Transformables (Era Clásica), Laya sigue atacando a Karmatrón, quien se encuentra muy debilitado porque no ha podido cargarse de energía. El Multitransformable lo levanta y lo lleva hacia un precipicio con intenciones de arrojarlo ahí. Zacek viaja al Planeta de la Eternidad para cargarse de energía y logra reponerse en el último instante cuando Laya lo arroja al vacío. Karmatrón contraataca con sus rayos megatónicos, logra derribar al Monstruo y reanudan su pelea.
Mientras tanto, Shilbalam descubre un punto débil de Laya: el monstruo ya no es de energía, ya que tiene un cuerpo formado por las partes de los Transformables por lo tanto, no tiene mas capacidad de absorción. Dhatú infiere que con si se le aplica una sola chispa energética pura, estallaría como una supernova. Con esta información, se dirigen a la sala de control para comunicarse con Zacek.
Al llegar a la sala de control, Shilbalam entra en contacto telepático con Karmatrón y le indica que la única manera para vencer a Laya es administrando energía pránica ya que su capacidad de absorción había llegado a su límite: con una sola chispa el monstruo explotaría. Con una rapidez increíble, Karmatrón lanza un shuriken de energía pura que provoca efectos catastróficos para Laya. La sobrecarga de energía hizo que explotara en mil pedazos.
(Continuará)
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